Estaba en el porche de la casa de mis suegros al caer la noche y juro que en mi sano juicio y descansada, relajádamente observando la preciosa zona vecinal que rodea su casita. Cuando me dió por mirar en un punto del chalet de uno de los vecinos, en la parte de arriba y pude observar perfectamente cuatro siluetas que yo sabía que eran cadáveres, pero que eran cuerpos de personas muertas ahorcadas y metidas en sacos, se me pone la piel de gallina al recordarlo. Fué algo rápido pero la imagen totalmente nítida. Me fuí para dentro de la casa a abrazar a mi marido del pavor que me dió esa experiencia con el corazón a mil. El me preguntó qué me sucedía y al salir no vió absolutamente nada. Cada vez que voy a casa de mis suegros no puedo evitar mirar esa zona, que por suerte siempre está despejada y sin nada, igual que aquel día que no había absolutamente nada que me pudiera haber hecho confundir con esa macabra visión.

siniestro ahorcados espectros